Cuando apenas transcurría el minuto 30′ en el reloj, el árbitro central determinó detener este partido de la Primera División de Chile. Entre los relatos de los narradores se lamentaban los hechos, pues no entendían el porqué se lanzaba la pirotecnia. Incluso, ingresó la policía.
Después de lo ocurrido la cadena televisiva que transmitió dicho juego, se pronunció mediante un comunicado en el que exigió que se tomen acciones contundentes, para detener la violencia en el futbol de Chile. Algo que dijeron no ser nada nuevo en dicho país:
“Agresiones a profesionales de nuestras compañías, equipo de árbitros, y personal de seguridad; no pueden pasar desapercibidas. La violencia en el fútbol chileno ya no es un hecho aislado. Es deber de las autoridades detener este tipo de agresiones que afectan al fútbol”.
Después de que se suspendiera el Clásico Universitario, la Asociación Nacional de Futbol Profesional de Chile comunicó: “Se ha decidido reprogramar el partido suspendido, en día, hora, lugar y sin público”. Además, el Presidente de Chile también opinó al respecto.
“No vamos a dejar que un grupo pequeño de delincuentes se tome los estadios a costa de la gran mayoría que acude a ver un espectáculo en paz y alegría. Vamos a identificar y hacer caer todo el peso de la ley a los que provocaron esto y espero no vuelvan a entrar a una cancha”, publicó Gabriel Boric Font en sus redes sociales.