CDMX. – Si la Lucha Libre Mexicana es reconocida como una de las mejores del mundo, es gracias a los gladiadores arriba del ring. Imposible olvidar los memorables combates que regalaron leyendas como Mil Máscaras, Dos Caras, Máscara Año 2000, El Satanico. En la rama femenil, figuras como Irma González, su hija, Lola González, Irma Aguilar o La Marquesa. Por tal motivo, el Senado de la República decidió rendir un homenaje en vida a estos estandartes de los encordados.
Por iniciativa de la Cámara de Senadores, las figuras que marcaron época fueron invitadas a una ceremonia donde el senador Eduardo Ramírez Aguilar destacó la importancia del deporte espectáculo en nuestra cultura y el enorme valor que tiene en las nuevas generaciones de jóvenes que buscan refugio en la actividad física.
“Hay que reconocer en vida, reconocer a estos personajes que nos han dado identidad nacional, yo crecí con la leyenda del Santo, con las películas que no se inspiraron a ustedes, Mil máscaras, Tinieblas, etc”, comentó el funcionario.
De a poco fueron desfilando por el pódium Octagón, El Signo, Fuerza Guerrera y el resto de estrellas, donde la única ausencia de la tarde fue la del Negro Navarro y El Hijo del Santo, quienes también estaban invitados a los honores.
“Nosotros representamos al país cada que tenemos funciones internacionales, y este tipo de espacios son cada vez más necesarios para fortalecer la dignidad y orgullo del luchador, así como para que las nuevas generaciones se sientan otra vez interesados con este importante deporte”, comentó el Fantasma, Comisionado de Lucha Libre en la CDMX.
De mano en mano, Eduardo Ramírez entregó a los gladiadores los diplomas que sirvieron como un hecho histórico en el deporte mexicano, ya que es la primera vez que algo así sucede por parte de las autoridades y no de los promotores de lucha libre o medios de comunicación.
Finalmente, Nancy de la Sierra, senadora por el estado de Puebla dejó muy claro que el pancracio en nuestro país en más que un deporte común entre las masas y que las máscaras son un símbolo de peso en nuestra sociedad.
“Eso nos ha dado una identidad nacional, queda trascendido en todo el mundo, a mí me da muchísimo gusto que la lucha libre no solamente sea una representación de lo que somos, me da gusto que el Fantasma haya logrado siendo el personaje que es, seguramente con mucho trabajo, que la lucha libre sea Patrimonio Intangible de la ciudad de México”.
Con información de Esto