El dirigente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados en Quintana Roo, Julio Villarreal Zapata, consideró que no es momento para la disminución de la jornada laboral a 40 horas en México.
Cancún, Q. Roo.- El dirigente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados en Quintana Roo, Julio Villarreal Zapata, consideró que no es momento para la disminución de la jornada laboral a 40 horas en México.
“La parte de la industria de servicios no está siendo del todo boyante, tenemos que tener cautela con este tipo de reformas que pueden ser lesivas para las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipyme)”, dijo.
El empresario restaurantero consideró que una opción podría ser la aplicación paulatina de la reforma, es decir, que las empresas de manera progresiva adopten esta reducción de las jornadas laborales para que tengan tiempo de adaptar sus plantillas de trabajadores.
De lo contrario, advirtió que habrá afectaciones serias, sobre todo para el sector Mipyme, que son las que carecen de recursos para poder hacer frente al nuevo requerimiento de personal que supone aminorar las jornadas laborales de sus empleados para cubrir su operación.
El dirigente restaurantero celebró que el primer dictamen de esta reforma no haya sido aprobado en la recién concluida legislatura, lo cual dará tiempo a que se enriquezca la propuesta y se consideren las voces empresariales que han solicitado dosificar la entrada en vigor de esta medida.
En ese mismo sentido se pronunció el sector hotelero en voz de Jesús Almaguer Salazar, presidente del Consejo Hotelero de Quintana Roo, quien consideró que ya en la pasada administración se aprobaron distintas medidas que si bien fueron benéficas para los trabajadores, como el aumento al salario mínimo, sí resultó complicado acatarlas por parte del sector patronal.
Estatus de la reforma
Esta semana se presentó en la Cámara de Diputados una propuesta alternativa de reforma para reducir la jornada laboral, la cual contempla un periodo de transición gradual y un programa piloto para determinar el tiempo de implementación de esta medida.
La legislatura pasada ya contaba con un dictamen, pero no les alcanzó el tempo para votar la propuesta, por lo que en la nueva legislatura la reforma debe iniciar su trámite desde cero, es decir, desde la presentación de iniciativas.
Información: El Economista.