PUERTO MORELOS.- Con el propósito de promover una sociedad más armónica, el Instituto Municipal de la Mujer (IMM) de Puerto Morelos impartió el curso “Inteligencia Emocional”, dirigido a los taxistas del Sindicato “Luis Donaldo Colosio Murrieta” de la Delegación Leona Vicario, dio a conocer la titular de la dependencia, Arlette Escudero Ordóñez.
Las y los choferes del servicio de transporte son parte importante en la economía de nuestra Delegación. Son prestadores de servicios que están sometidos a altos niveles de estrés, que pueden repercutir en su desempeño. Es por eso que les proporcionamos herramientas que los ayuden a controlar sus emociones”, indicó.
El curso fue impartido por el psicólogo Diego López Herrera, del Centro para el Desarrollo de las Mujeres (CDM) del Estado, con el apoyo de las psicólogas Martha Alicia Vázquez Román y Rosa María Rodríguez Díaz, además de la abogada Brenda Ramírez Martínez. Entre los temas abordados estuvo “Paradigmas y cualidades del cambio”.
La psicóloga Rosa María Rodríguez explicó que un paradigma es todo aquel modelo, patrón o ejemplo que debe seguirse en determinada situación y propuso reconocer los factores que facilitan o dificultan el cambio de modelos sociales, a fin de sensibilizar a los conductores en temas de igualdad, creencias y género, entre otros.
“Cuando hay un reconocimiento de los problemas que los aquejan se pueden establecer rutas de solución que generen sentimiento de bienestar, el cual debe incidir en su entorno personal, familiar y laboral”, destacó.
Finalmente, los taxistas de Leona Vicario agradecieron la capacitación, que les permitirá manejar sus emociones, a fin de que en el desempeño de su trabajo se mantengan tranquilos y eso los ayude a prevenir accidentes.
En otro orden de ideas, Arlette Escudero destacó que se organizó un evento denominado “Zumba Party”, que tuvo lugar en el parque principal del Casco Antiguo, en la cabecera municipal, con el objetivo de que la población de mantenga activa a través del ejercicio, además de fomentar la salud y la sana convivencia