El relevo del mexicano y un cuadrangular de Cody Bellinger le dieron a los angelinos el pase a la gran final
Los californianos forzaron el séptimo juego en el Campeonato por la Liga Nacional y superaron 4-3 a los Bravos de Atlanta
Tres Series Mundiales en las últimas cuatro temporadas para los Dodgers, todavía con Dave Roberts al mando; en las pasadas dos apariciones quedaron cortos (frente a Astros y Red Sox), y, a partir de este martes, los Rays de Tampa Bay son el rival a vencer.
Los Dodgers forzaron el séptimo duelo, tras irse 3-1 en la serie. La novena californiana no podía dejar escapar la oportunidad de buscar otra aparición en el clásico de otoño. Su plantel es más talentoso y con mayor experiencia, en comparación con los Bravos, por lo volver a quedar cortos significaría otro fracaso en esta era angelina.
Kike Hernández, con un cuadrangular en el sexto inning, igualó la pizarra a tres carreras, un impulso que necesitaba Los Ángeles y el juego, disputado frente a 11 mil aficionados en el Globo Life Field, en Texas.
En la misma entrada Chris Taylor recibió el out sobre el plato, tras una jugada defensiva de Ozzie Albies y culminada por el catcher Travis d’Arnaud, de Atlanta.
El mexicano Urías entró de relevo para el séptimo capítulo y protegió la pizarra californiana, porque Bellinger reventó un lanzamiento de Chris Martin rumbo al jardín derecho y adelantó a los Dodgers.
El sinaloense apareció en la octava y novena, sin recibir hit u otorgar bases, y fue así que se llevó la victoria, la sexta –cuarta como relevista– en su carrera en postemporada de Grandes Ligas. Los Ángeles de buscar su primer anillo de campeonato en 32 años.
La temporada atípica y corta de Grandes Ligas está por terminar. La Serie Mundial arranca este martes, frente a los Rays de Tampa Bay, el mejor equipo de la Liga Americana y que manejan a la perfección el balance sobre el montículo y en el plato.