EU.- Jason Kelce oficialmente le ha dicho adiós a la NFL, después de 13 temporadas, un anillo de Super Bowl y seis selecciones al primer equipo del All-Pro, el egresado de Cincinnati que llegó a los Philadelphia Eagles como parte del Draft de 2011 en la elección 191 de la sexta ronda siendo un total desconocido se despidió entre lagrimas y agradeciendo tanto a sus fans como a los que lo criticaron.
En su llegada a Philadelphia en 2011 prácticamente nadie confiaba en que pudiera hacerse de un lugar en el equipo titular, sin embargo, en palabras de Kelce, esa poca o nula confianza que se tenía en él lo llevaron a no dejar de trabajar.
“Pocas cosas me dieron más alegría que demostrarle a alguien que estaba equivocado. Mi madre solía decirle a la gente y todavía lo dice hasta el día de hoy. “Si quieres que Jason haga algo, todo lo que tienes que hacer es decirle que no puede“, aseguró el siete veces Pro Bowler.
Con 1.91 metros de estatura y 134 kilos de peso, Jason llegó a generar dudas por su presencia en la línea ofensiva pero cada vez que alguien ponía sobre la mesa su habilidad en los emparrillados, él se motivaba para demostrar que estaban equivocados.
“Disfruto de los escépticos; alimentan el fuego interior. Sospecho que viene de una crianza en la que mis padres me decían: ‘Jason, puedes hacer, puedes ser cualquier cosa que te propongas y trabajas duro para lograrlo‘”.
Tras 13 años de carrera, la ciudad de Philadelphia se enamoró de las actuaciones del número 62 y ese cariño al legendario centro aumentó cuando fue clave para la conquistar del primer Super Bowl en la historia de la franquicia. La importancia de Jason Kelce en la “Ciudad del Amor Fraternal” es enorme y así lo expresó Jeffrey Lurie, dueño de los Eagles a través de un comunicado.
“Él nos dio todo lo que tenía durante 13 años. Y lo hizo de una manera verdaderamente auténtica. Jason era un jugador de fútbol increíble: un futuro miembro del Salón de la Fama que habría tenido éxito en cualquier lugar. Pero, ¿alguna vez ha habido ¿Un matrimonio más perfecto entre un jugador, una ciudad y un equipo?”, fueron las palabras del CEO de los Eagles en el adiós de un jugador legendario.
Así es cómo llegó a su fin una legendaria carrera de 13 temporadas, 193 juegos, un anillo de Super Bowl y seis selecciones de All-Pro, demostrando que lo único que puede frenar tu progreso es dejar que te afecten las palabras de alguien más.