EU.- El narcotraficante Genaro García Luna fue sentenciado a 38 años y cuatro meses y a pagar una multa de 2 millones de dólares, por el juez Brian Cogan, de la Corte Federal de Distrito Este en Brooklyn, Nueva York, como castigo a sus nexos con el Cártel de Sinaloa.
Cogan le aplicó la pena mínima a García Luna, solicitada por su equipo de defensa legal a cargo del abogado de oficio, César de Castro.
El 21 de febrero de 2023, un jurado calificador integrado por 12 ciudadanos de Nueva York, por unanimidad declararon culpable a García Luna de cinco delitos por narcotráfico y de haberle mentido a un agente migratorio que le impugnó Estados Unidos.
García Luna, amigo, asesor, confidente, mano derecha y secretario de Seguridad Pública del expresidente Felipe Calderón fue detenido por agentes de la DEA en diciembre de 2019, en Dallas, Texas, tras ser acusado formalmente de narcotráfico y de mentir a un agente migratorio.
La condena dictada por Cogan, significó un fracaso para los fiscales federales del Departamento de Justicia que le habían pedido al juez que castigara con cadena perpetua al confidente del expresidente Calderón.
El tortuoso y largo peregrinaje de García Luna en la Corte Federal en Brooklyn que inició en 2020, no termina con la sentencia dictada por el juez Cogan ya que tiene la opción de cooperar con los fiscales que lo procesaron judicialmente en Brooklyn.
Durante el juicio en Brooklyn, varios narcotraficantes que integraron al Cártel de Sinaloa y en especial a la Fracción de los Beltrán Leyva, como Sergio Villarreal Barragán “El Grande”, declararon que a cambio de sobornos García Luna facilitaba operaciones y proporcionaba información confidencial del gobierno de Calderón en contra del narco.
El exencargado de la seguridad de México en el también llamado “Sexenio de la muerte”, tiene la posibilidad de evitar purgar los 38 años tras las rejas en alguna prisión federal estadunidense.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos le mantiene sobre la mesa a García Luna de 57 años, la oferta de que se convierta en testigo cooperante con lo que podría conseguir eventualmente que Cogan le reduzca la condena a unos de siete años de prisión.
Como testigo cooperante de los fiscales federales de Estados Unidos, García Luna tendría que proporcionarles información sobre quienes más –funcionarios federales, inclusive expresidente si fuera el caso, militares, gobernadores y policías, por ejemplo, durante los sexenios de Calderón y de Vicente Fox– estuvieron coludidos con el narcotráfico internacional y los cárteles mexicanos.
Bajo un acuerdo de cooperación con el Departamento de Justicia y si le reducen la condena a unos cuantos años, García Luna podría quedar en libertad en Estados Unidos en poco tiempo porque a su castigo se le reducirían los casi cinco años que lleva en la cárcel desde que fue arrestado.
Estará en manos de los abogados de García Luna y de él si acepta el acuerdo de cooperación, con el que incluso evitaría que se le extradite a México donde se le acusa de delitos contra la salud (narcotráfico) y lavado de dinero, entre otros cargos que le achaca el gobierno federal.
Fuente Proceso