CDMX.- Real Oviedo, equipo que pertenece al Grupo Pachuca de México, no logró quedarse con el boleto para disputar la Temporada 2024-25 de LaLiga, pues en la Final de Vuelta por el Ascenso fue vencido 2-0 por el Espanyol, lo cual dejó el marcador global en 2-1 a favor de los Periquitos.
Javi Puado fue el verdugo del conjunto de Asturias. Al delantero de 26 años de edad le bastaron menos de cinco minutos para convertirse en el héroe del conjunto catalán tras marcar el doblete del triunfo en la cancha del Stage Front Stadium.
Los primeros minutos del encuentro fueron un previsible tanteo. El Espanyol tenía la iniciativa, combinaba atrás y buscaba huecos, diagonales y algún balón largo contra un Oviedo bien plantado atrás. Las amenazas del anfitrión eran escasas y tímidas, como un latigazo de Braithwaite que chocó en Dani Calvo.
Los asturianos, con ventaja en la ida, no corrían riesgos arriba. Los de Luis Carrión se limitaban a contener a sus rivales, que poco a poco se acercaban con más peligro. Dubasin frustró una ocasión clara de Pere Milla y los saques de esquina en el campo visitante eran cada vez más frecuentes.
El Oviedo esperaba, fabricaba un partido trabado y salía a la contra. Alemao, en una de esas acciones, forzó una amarilla para Cabrera, que cortó su carrera. A partir del minuto 20, el claro dominio del balón del Espanyol se redujo y los ovetenses pisaban más los dominios del portero Joan García.
Los de Manolo González insistían. Avisaron con un remate forzado de Nico Melamed desde la frontal, pero fue Puado, en el 44 y cuando parecía que la primera parte estaba sentenciada, el que abrió la lata y levantó al Stage Front Stadium conectando un saque de esquina tras liberarse de su marcador.
El Espanyol había noqueado al Oviedo y aprovechó el momento para aumentar su ventaja antes del descanso. Puado, de nuevo, le ganó la espalda a Seoane y puso el 2-0 en el luminoso. Los periquitos, en tres minutos, rompieron la telaraña rival y pusieron un pie en Primera División.
En la reanudación, los visitantes salieron en tromba con ocasiones para Viti y Borja Sánchez. Los de Carrión estaban obligados a marcar. Los visitantes apretaban a los catalanes, aunque sin excesiva precisión en sus ataques. El cuadro local había bajado sus revoluciones arriba.
Las prisas del Oviedo dibujaron un pulso más abierto y el Espanyol se encontraba muy cómodo esperando su oportunidad de ampliar la ventaja. Luis Carrión apostó por Cazorla y Masca en el minuto 63 para romper el control blanquiazul. El doble cambio devolvió la iniciativa a los asturianos, que estaban a un gol de la prórroga.
La experiencia y la visión de Cazorla rediseñó el ataque de los suyos, que inquietaron a Joan Garcia con mayor criterio y veneno. Sin embargo, no bastó para romper el 2-0 ni para evitar que el anfitrión siguiera apretando arriba mientras el reloj seguía avanzando.
En el minuto 77, Borja Bastón reclamó penalti por un agarrón de Brian Oliván, pero el colegiado no le dio la razón. El Oviedo iba con todo y Manolo González enfrío el pulso con un triple cambio. El ímpetu asturiano duró hasta el tiempo añadido, con un remate de Borja Bastón que paralizó el estadio.
De todos modos, el portero Joan Garcia y el cronómetro se aliaron para que las gradas pudieran celebrar, un curso después, el ansiado ascenso a Primera División del Espanyol. El Oviedo, pese a su meritoria temporada, deberá esperar su oportunidad para regresar a la máxima categoría.
Fuente Mediotiempo