Las licitaciones de obra pública realizadas por dependencias federales son simuladas para favorecer a empresas foráneas.
Pese a los anuncios de la administración federal de combatir la corrupción, esta práctica continúa.
Las empresas locales no tienen margen de maniobra y tienden a dejar de operar, denunció Palomo Hoil.
De 322 constructoras agremiadas a la CMIC, solamente el 20 por ciento realiza algún tipo de obra. Y es que algunas mediante subcontrato.
“Los funcionarios federales eligen discrecionalmente a las empresas favorecidas, dejan de lado la transparencia y provocan la desconfianza en estos procesos”, destacó.
Precisó que la delegación de la SCT emitió una licitación restringida a tres empresas para una obra de supervisión de la reconstrucción de pavimento en la carretera Escárcega–Chetumal y en la carretera Lázaro Cárdenas–Polyuc.
La obra será asignada este lunes a la empresa que garantice satisfactoriamente el cumplimiento de las obligaciones respectivas y cuya propuesta sea considerada solvente y sea la mejor postura para los intereses de la Convocante.
En la convocatoria se hizo invitación a una empresa con razón social en Villahemosa, Tabasco, y no a empresas locales.
Denunció que la delegación de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) emitió otra licitación para servicios de mantenimiento de vehículos con el mismo procedimiento de invitación restringida, con la salvedad de que en el portal de Compranet no mencionan a las tres empresas invitadas.
“Todos estos procesos de licitaciones restringidas está en manos de los funcionarios federales que determinan cuáles son las tres empresas y que son las únicas que pueden realizar propuestas, siendo en muchos casos una simulación porque invitan a foráneas y empresas pseudo locales que solo cuentan con un domicilio fiscal en casas habitación abandonadas”, acuso.
Para evitar tales prácticas se requiere cambio de funcionarios federales y designar en su lugar a locales, finalizó.
Con información de Reporteros de Banqueta