QATAR.- La selección de Brasil bailó con Corea del Sur, luego de golearla 4-1 en el Estadio 974, en duelo correspondiente a los octavos de final de Qatar 2022, metiéndose a la siguiente instancia al ritmo de la samba.
La Canarinha no quiso problemas en este partido, pues desde los primeros instantes se puso al frente en el marcador con un tanto de Vinicius apenas a los seis minutos de juego.
Se conectaron los hombres del Barcelona y Real Madrid; Raphinha mandó un centro pasado, donde Vini controló para mandar a guardar el balón al ángulo del segundo poste.
Brasil solo necesitó de seis minutos más para ampliar la ventaja. Richarlison robó la pelota dentro del área, donde el defensa asiático no se dio cuenta de su llegada por la espalda, cuando intentó despejar la pelota pateó al delantero del Tottenham, decretándose la pena máxima al 12′.
Neymar fue el encargado de poner el 2-0, luego de engañar al portero Seung-Gyu Kim, con una obra maestra para tirar el penalti.
El Scratch Du Oro siguió dando cátedra del Jogo Bonito en el Estadio 974, sobre todo en el tercer tanto al minuto 28.
El triunfo de Brasil ante Corea tuvo la presencia de Pelé. Que en los últimos días ha estado muy delicado de salud. Por lo que la Selección y la afición decidió rendirle homenaje de esta manera. 🇧🇷🥹❤️ #Qatar2022 #CoreaBrasil#Qatar22XSopitas pic.twitter.com/qCHN1WEVYQ
— Sopitas (@sopitas) December 5, 2022
Richarlison controló la pelota al dominarla en repetidas ocasiones con la cabeza, para después dársela a Marquinhos, quien se la dio a Casemiro en los linderos del área y éste devolvérsela a Richarlison para mandar a guardar la pelota con un disparo bien colocado.
Brasil definió su pase a los cuartos de final antes de terminar la primera mitad con un cuarto baile al minuto 35. Con otra muestra de Jogo Bonito, la Canarinha volvió a penetrar las redes para darle la última estocada a Corea del Sur.
La cereza en el pastel la puso Lucas Paquetá, quien recibió un pase ‘bombeadito’ de Vinicius en el área, donde solo tuvo que prender el esférico para volver a sacudir las redes rivales.
Para el complemento, con el partido prácticamente definido, Brasil bajó las revoluciones para no cansarse de más ni recibir algún golpe que les pueda perjudicar en los cuartos de final. Lo plausible es que jamás bajaron los brazos pese a la apabullante goleada en la primera mitad.
El gol de la honra para los sudcoreanos llegó al 76, con un cañonazo impresionante Seung-Ho Paik, la única forma para vencer a Alisson Becker que estuvo en plan grande en casi todo el encuentro.