LOS ÁNGELES. Bradley Cooper se tuvo quitar todo la ropa en el rodaje de “Nightmare Alley” (El callejón de las almas perdidas), la nueva película de Guillermo del Toro, y reveló que no le fue nada fácil pese a sus años de carrera en Hollywood.
El actor se sinceró sobre cómo transitó su primera vez haciendo un desnudo frontal en cine.
En una reciente entrevista con The Hollywood Reporter, Cooper contó sobre la secuencia que le resultó muy difícil de abordar en el thriller psicológico, que está basado en la novela homónima de William Lindsay Gresham, publicada en 1946.
En el largometraje, Cooper interpreta a Stanton Carlisle, un carismático manipulador quien estafa a millonarios con la ayuda de la psicóloga Lilith Ritter, interpretada por Cate Blanchett.
Decidir desnudarse por completo frente a la cámara fue una decisión que el actor no tomó a la ligera, calificando todo el asunto como “un gran problema”, principalmente porque nunca lo había hecho.
Seis horas desnudo
La complicada escena transcurrió durante el “primer día” de filmación de Toni Collette, y Cooper tuvo que estar desnudo “frente al equipo durante seis horas”.
El actor, de 47 años, recordó la incómoda experiencia en conversación con el citado medio.
“Todavía puedo recordar ese día desnudo frente al equipo durante seis horas, y fue el primer día de Toni Collette. Fue bastante fuerte”, manifestó.
Si bien admitió que su primera escena de desnudo fue “un gran problema”, Cooper dijo que la decisión de aparecer desnudo se tomó por razones puramente artísticas.
“Porque el contenido de la película, lo que estábamos explorando, para hacerlo de una manera real, exigía que nos desnudáramos de una manera emocional”, explicó el artista.
El actor, quien fue nominado al Oscar en ocho ocasiones, aspira a una nueva candidatura el 8 de febrero por su trabajo secundario en “Licorice Pizza” de Paul Thomas Anderson.
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