Ciudad de México. Cuando falta menos de una semana para concluir su gestión, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha zanjado con un decreto la pugna que el Gobierno sostenía desde hace años con la minera estadounidense Vulcan Materials por el control de 2 mil hectáreas de tierra caliza y del puerto de Punta Venado, en Quintana Roo.
El gobierno federal ha publicado la declaratoria de área natural protegida de un polígono de más de 53 mil hectáreas de la península del sureste mexicano, que abarca los terrenos sobre los cuales está la mina de cielo abierto de Vulcan Materials. La empresa ha contestado que se defenderá legalmente para esquivar la expropiación de Punta Venado y la cantera Sac Tun, cerca de Playa del Carmen.
El documento establece que, dentro de las zonas del área de protección de flora y fauna Felipe Carrillo Puerto, queda prohibida la exploración, explotación de minerales, abrir bancos de material, extraer material pétreo o materiales para construcción y construir depósitos o sitios de disposición final de terreros, jales, escorias, graseros de las minas y establecimientos de beneficios de los minerales. El decreto supone un cese a las actividades que la minera estadounidense realizaba en la zona hasta hace un par de años.
La declaratoria refiere que los propietarios, poseedores o titulares de otros derechos sobre tierras y aguas, que se encuentren dentro de la superficie del área de protección de flora y fauna Felipe Carrillo Puerto, están sujetos a las modalidades que se establecen en la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente. Es decir, que están obligados a llevar a cabo sus actividades conforme a los criterios de preservación y conservación de los ecosistemas.
El decreto hace hincapié en la extensa variedad de flora, fauna y vestigios arqueológicos de la zona. El documento enumera las especies endémicas de mamíferos, réptiles y aves que serán beneficiadas con esta protección ambiental.
“En el sitio Felipe Carrillo Puerto, habitan 304 especies de aves que representan el 63 % de la riqueza estatal. Además, 52 especies se encuentran en alguna categoría de riesgo, cuatro de ellas en peligro de extinción, como el zopilote rey, el mosquero real, entre otras”, indica.
Además, la orden presidencial expone que esta zona también reúne cuevas, cenotes y grutas que forman parte del paisaje y sostienen el acuífero Península de Yucatán, que es la mayor fuente de agua dulce para consumo humano y la biodiversidad.
Vulcan Materials ha criticado el actuar del Gobierno mexicano y ha asegurado que se defenderán mediante todas las vías legales disponibles.
“La acción más reciente —declarar formalmente nuestros inmuebles y puerto como Área Natural Protegida (ANP)— es una parte más de una serie de amenazas y acciones de la actual administración contra nuestras operaciones, operaciones que son legales y cuentan con las autorizaciones necesarias en el país. La expropiación de los terrenos y el puerto propiedad de nuestra empresa es otra escalada más y una nueva violación de los compromisos de México en el marco del TMEC y otros tratados de inversión aplicables”, refirió la minera estadounidense por escrito.
En junio AMLO amenazó, en su momento, con denunciar ante la ONU a la empresa Vulcan Materials, propietaria de la minera Calizas Industriales del Carmen (Calica), si esta continuaba con sus operaciones de extracción en la Riviera Maya, al señalar que esta compañía norteamericana había provocado una catástrofe ecológica.