El Tricolor no solo ganó, goleó a Honduras 4-0 y lo hizo jugando bien, y es que otra vez se vio comunión, entusiasmo y protagonismo, tal y como lo prometió el Jimmy Lozano en su presentación como entrenador interino.
El equipo de Lozano tuvo la sabiduría para oler el momento, para seguir encima de los hondureños y no dejarlos ni respirar con la alta presión que hacían y a los 23 minutos el mismo Romo marcó su segundo de la noche.
Honduras no metió ni las manos, jamás pudo acercarse con malicia al arco de Memo Ochoa en el primer tiempo y en el segundo la dinámica del juego fue la misma con una Selección Mexicana arrolladora.
Si hace una semana todo era un drama con la Selección bajo el mando de Diego Cocca, hoy con Lozano todo fue alegría, fiesta y no era para menos el equipo mexicano estaba jugando su mejor partido en mucho tiempo.
La cereza en el pastel la puso Luis Chávez, el elemento de Pachuca definió de tres dedos dentro del área para el cuarto tanto y entonces sí, México volvía a comportarse como un gigante ante un equipo de la Concacaf.
El siguiente juego del Tri
El siguiente partido de México será contra Haití dentro del Grupo B y de ganar ese compromiso estará amarrando la clasificación a la siguiente ronda de esta Copa Oro que de no haber tenido los cambios que se tuvieron, la historia hubiera sido otra.