Carlo Acutis es llamado también Patrono de Internet, pues buscaba llevar la palabra de Dios a través de la tecnología
El próximo 10 de octubre, será beatificado Carlo Acutis, un joven italiano que murió a los 15 años y fue conocido como el “ciberapóstol de la Eucaristía”, anunciaron autoridades del Vaticano.
Luego de su beatificación Carlo podría convertirse en el evangelizador del siglo XXI al ser llamado “Patrono de Internet”, pues sus seguidores lo denominan el primer influencer de Dios, quien buscaba llevar la palabra de Dios a través de la tecnología.
Carlo nació en Londres, el 3 de mayo de 1991 y en 2005 ingresó a la preparatoria León XIII, dirigida por los Jesuitas. En ese tiempo, Carlo destacó por su afición a las computadoras. Se dedicó a crear páginas de internet. Incluso colaboró en la creación de la página vatican.va.
Sus amigos lo recuerdan como un joven capaz, libre y alegre que se distinguió por su profunda espiritualidad, pues asistía diariamente a la celebración eucarística y acudía con regularidad al sacramento de la confesión.
Se distinguió por ayudar a los más necesitados, entre ellos a migrantes, personas con alguna discapacidad, niños y ancianos.
En octubre de 2006 cayó enfermo y fue diagnosticado de leucemia. Al enterarse de su padecimiento, les dijo a sus padres: “Ofrezco todo el sufrimiento que debo soportar por el Papa y por la Iglesia”. Murió el 12 de octubre del mismo año.
Carlo cultivó una gran amistad con Jesús Eucaristía y llevó a cabo algunas exposiciones en internet, de entre las cuales sobresale una sobre los milagros eucarísticos reconocidos por la Iglesia (miracolieucaristici.org).
El Papa Francisco terminó su mensaje, el 28 de julio de 2013, en Rio de Janeiro, diciendo: “Queridos jóvenes: Jesucristo cuenta con ustedes. La Iglesia cuenta con ustedes. El Papa cuenta con ustedes. […] «Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos»”. Estas palabras se hacen realidad en el Bienaventurado Carlo Acutis.
“Su testimonio es un bello ejemplo de un joven capaz de influir en la vida de muchas personas, especialmente de los jóvenes. Su beatificación es un aliciente para que los ellos se conviertan en misioneros en internet, en las redes sociales y en todos los ambientes donde se desenvuelven, siendo, sobre todo, evangelizadores de otros jóvenes; asimismo, es un signo para que la Iglesia ponga en el centro de sus esfuerzos el acompañamiento pastoral a los jóvenes, quienes son el presente y futuro de la sociedad y de la Iglesia”, indicó el Papa.