La paradisiaca Isla de Holbox al norte de Quintana Roo se encuentra otra vez bajo el agua, en medio de olores desagradables y pestilentes, por la nula planeación urbana, la falta de servicios básicos
CIUDAD DE MÉXICO.- La paradisiaca Isla de Holbox al norte de Quintana Roo se encuentra otra vez bajo el agua, en medio de olores desagradables y pestilentes, por la nula planeación urbana, la falta de servicios básicos, el crecimiento desmedido, el mal manejo de la basura, la tala de manglar, y el abandono de los tres órdenes de gobierno, denunció el Grupo Ecologista del Mayab (GEMA).
Araceli Domínguez, presidenta de GEMA indicó que en los últimos cinco años los ecosistemas de Holbox, que pertenece al Área de Protección de Flora y Fauna Yum Balam, fueron gravemente deteriorados por falta de voluntad política, corrupción y malos manejos de autoridades y empresarios.
Indicó que las inundaciones obedecen a las mareas altas, acumulación de agua por lluvias en el acuífero y reducción del nivel del suelo a consecuencia de la compactación por pérdida de manglares y vegetación de duna, según estudios de Jorge Herrera, investigador del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del IPN.
Un problema grave es que continúan las construcciones en la reserva sin las autorizaciones de impacto ambiental por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la falta de inspección y vigilancia de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la falta de interés de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
“Todo lo anterior ha sido posible debido a la impunidad que prevalece entre aquellos que llegan a destruir ecosistemas, construir casas y edificios sin permisos, ni estudios ante los ojos de una autoridad ausente, omisa y complaciente”, lamentó.
La ambientalista agregó que la visión equivocada de las autoridades desencadenan, por un lado, la desintegración social, con enfrentamientos violentos y un impacto irreversible en algunos puntos de la isla.
“La situación que prevalece en Holbox es desesperante. Son los pobladores e inversionistas de fuera quienes han puesto en riesgo los ingresos económicos del lugar que vive del turismo”, manifestó.
Agregó que es lamentable que ningún nivel de gobierno, “ni en ésta y ni en administraciones anteriores hayan aportado recursos, para dotar de un sistema de tratamiento de aguas negras a Holbox y del manejo adecuado de los desechos, demostrando un total desinterés en resolver la terrible contaminación, las constantes violaciones a las leyes y los conflictos sociales”.
Información de Excelsior