JALISCO.- Todo el horror que ha vivido México se ha concentrado en una calle del estado de Jalisco (al centro oeste de México). El municipio Lagos de Moreno ha amanecido con un cuerpo colgado y un narcomensaje presuntamente del Cártel Jalisco Nueva Generación: “Esto les pasa por chapulines”, se leía.
La escena se ha vuelto habitual en el hampa de México para difundir amenazas y mensajes. En Zacatecas, el pasado 19 de junio, fueron encontrados tres cuerpos en un puente, resultado de una guerra entre los bandos del Cártel de Sinaloa y CJNG.
Lagos de Moreno, localizado en la región Altos del Norte y limítrofe con Aguascalientes, ha vivido recurrentes episodios de violencia. Desde hace una década, en el municipio, en el que operan grandes empresas de la industria automotriz, se empezó a conocer los ajustes de cuentas y enfrentamientos del narco.
La plaza, según los reportes de inteligencia, perteneció a Los Zetas, pero le fue arrebatada violentamente por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), que mantiene su base de operaciones en el estado jalisciense.
La región de Altos de Jalisco es una de las zonas con mayor índice delictivo en el estado, en el que es frecuente encontrar fosas clandestinas. El año pasado, en el municipio fueron encontrados 14 cuerpos sin vida, los cuales estaban cubiertos con cal. Algunos de ellos fueron encontrados con huellas de tortura visibles.
Antes de esta gran marca del narco, el CJNG sufrió la baja de 18 de sus sicarios, en Zacatecas. Al menos, así identificaron a las víctimas las autoridades.
Con información de Infobae