Un nuevo estudio refuerza la predicción de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de que la llamada variante B.1.1.7 dominará los casos de Covid-19 en marzo
Una variante más contagiosa del coronavirus encontrado por primera vez en Gran Bretaña se está extendiendo rápidamente en Estados Unidos, duplicándose aproximadamente cada 10 días, según un nuevo estudio. Analizando medio millón de pruebas de coronavirus y cientos de genomas, un equipo de investigadores predijo que en un mes esta variante podría llegar a ser predominante en Estados Unidos, lo que podría suponer una oleada de nuevos casos y un mayor riesgo de muerte.
La nueva investigación ofrece la primera mirada a nivel nacional de la historia de la variante, conocida como B.1.1.7, desde que llegó a Estados Unidos a finales de 2020. El mes pasado, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades advirtieron que la B.1.1.7 podría convertirse en predominante en marzo si se comportaba como lo hizo en Gran Bretaña. El nuevo estudio confirma esa trayectoria prevista.
“Nada en este documento es sorprendente, pero la gente necesita verlo”, dijo Kristian Andersen, coautor del estudio y virólogo del Instituto de Investigación Scripps en La Jolla, California. “Probablemente deberíamos prepararnos para que éste sea el linaje predominante en la mayoría de los lugares de Estados Unidos en marzo”.
El equipo de Andersen estimó que la tasa de transmisión de la B.1.1.7 en los Estados Unidos es entre un 30% y un 40% más alta que la de las variantes más comunes, aunque estas cifras pueden aumentar a medida que se obtengan más datos, dijo. La variante ya se ha visto implicada en repuntes en otros países, como Irlanda, Portugal y Jordania.
“Podría darse una situación muy grave en cuestión de meses o semanas”, dijo Nicholas Davies, epidemiólogo de la London School of Hygiene and Tropical Medicine que no participó en el estudio. “Pueden ser señales tempranas que justifiquen una investigación urgente por parte de las autoridades de salud pública”.
Davies advirtió que los datos de EU son más irregulares que los de Gran Bretaña y otros países que cuentan con sistemas nacionales de seguimiento de variantes. Aun así, consideró que los resultados de algunas partes de Estados Unidos son especialmente preocupantes. En Florida, donde el nuevo estudio indica que la variante se está extendiendo con especial rapidez, el Dr. Davies teme que una nueva oleada pueda llegar incluso antes que en el resto del país.
Cuando el gobierno británico anunció el descubrimiento de B.1.1.7 el 20 de diciembre, Andersen y otros investigadores de Estados Unidos comenzaron a buscarlo en muestras de coronavirus estadounidenses. El primer caso apareció el 29 de diciembre en Colorado, y Andersen encontró otro caso poco después en San Diego. En poco tiempo se detectó en muchas otras partes del país. “Si estos datos son representativos, puede haber poco tiempo para actuar”, dijo. Andersen y sus colegas publicaron su estudio en Internet el domingo. Todavía no se ha publicado en una revista científica.
Pero era difícil determinar el grado de difusión de la variante. El B.1.1.7 contiene un conjunto distintivo de 23 mutaciones dispersas en un genoma de 30.000 letras genéticas. La mejor manera de averiguar si un virus pertenece al linaje B.1.1.7 es secuenciar todo su genoma, un proceso que sólo puede llevarse a cabo con máquinas especiales.
El C.D.C. contrató a Helix, una empresa de pruebas de laboratorio, para que examinara sus muestras de Covid-19 en busca de signos de B.1.1.7. La variante puede dar un resultado negativo en una de las tres pruebas que Helix utiliza para encontrar el coronavirus. Para un análisis más profundo, Helix envió estas muestras sospechosas a Illumina para que secuenciaran sus genomas. El mes pasado, Helix se puso en contacto con Andersen y sus colegas para ayudar a analizar los datos.
Analizando 212 genomas americanos B.1.1.7, el equipo de Andersen llegó a la conclusión de que lo más probable es que la variante llegara por primera vez a Estados Unidos a finales de noviembre, un mes antes de ser detectada.
La variante se introdujo por separado en el país al menos ocho veces, muy probablemente como resultado de personas que viajaron a Estados Unidos desde Gran Bretaña entre Acción de Gracias y Navidad. Los investigadores combinaron los datos de la secuenciación del genoma con los resultados generales de las pruebas de Helix para llegar a una estimación de la rapidez con la que se había propagado la variante. Se hizo exponencialmente más común en los últimos dos meses.
En Florida, los científicos estiman que más del 4 por ciento de los casos son ahora causados por la B.1.1.7. La cifra nacional puede ser del 1 o el 2 por ciento, según los cálculos de su equipo.