CDMX.- Bajo la promesa de darle vida a una de las ceremonias de inauguración más espectaculares de la historia, con el imponente escenario que ofrece el Río Senna, el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos París 2024, en coordinación con el gobierno francés, continúan con los trabajos de logística de cara a la gran cita. A pesar de que en un principio se esperaba que la ceremonia fuera abierta a todo público, las autoridades parisinas han tenido que bajar las pretensiones por motivos de seguridad, por lo que los asistentes deberán contar con un registro previo que excluye a los turistas.
“Para gestionar el movimiento de multitudes, no podemos decirles a todos que vengan”, lamentó Gerald Darmanin, ministro del interior. “Por razones de seguridad que todos comprenden, en particular la amenaza terrorista de las últimas semanas, estamos obligados a hacerlo gratuito pero contenido”, señaló.
Y es que el hecho de que la ceremonia se lleve a cabo en las aguas del río, y no en un estadio, como es la costumbre, supone un reto mayor. En un principio, se esperaba una asistencia superior a las 600 mil personas, sin embargo, la cifra finalmente quedó en 300 mil. De acuerdo a lo previsto, 104 mil entradas de la gradería baja serán puestas en venta, mientras que las 222 mil restantes, en la parte superior, serán gratuitas, pero deberán contar con un registro previo el cual se asignará mediante cuotas de residentes seleccionados de las ciudades o regiones que albergarán eventos olímpicos, por lo que los turistas no podrán registrarse.
También se repartirán entradas entre federaciones deportivas locales y a otras personas elegidas por los organizadores o sus socios. “Las federaciones deportivas podrían invitar a extranjeros como parte de sus cuotas. Y las ciudades podrían ofrecer plazas a personas con discapacidad o en situación de necesidad, para “diversificar” el acceso”, afirmó Darmanin.
La inauguración, programada para el 26 de julio, pinta para ser espectacular. Los atletas desfilarán a bordo de 180 botes y a lo largo de seis kilómetros. En un recorrido que dará inicio en la moderna área de Bercy y tendrá su final en el Trocadero.
Con información de Esto